GAUTAMA EL BUDA
...La única cualidad que un buda posee en el centro de su ser es la observación, el ser testigo. Ser testigo es toda la espiritualidad comprimida en una palabra. Ser testigo de que no eres el cuerpo, de que no eres la mente y testigo de que sólo eres un testigo. Sólo un espejo que refleja sin ningún juicio, sin ninguna apreciación, sin condenar nada: un puro espejo. En eso consiste ser un buda.
Ser un buda no quiere decir ser budista. El budista es un seguidor, el buda sabe.
En el momento en que conoces tu condición de buda, has conocido a todos los budas; la experiencia es la misma.
Quédate en silencio. Cierra los ojos.
Siente como si el cuerpo se te congelara por completo.
Mira hacia dentro tan profundo como puedas.
Este es el camino.
Al mismísimo final del camino eres el buda.
El viaje es muy corto; un simple paso.
Solo es necesaria una urgencia total y absoluta honestidad
para mirar directamente dentro de tu propio ser.
Allí está el espejo; el espejo es el buda.
Es tu naturaleza eterna.
Tienes que ir más y más profundo dentro de ti
hasta encontrarte a ti mismo.
No dudes. No existe el miedo.
Desde luego estás a solas,
pero esta soledad es una experiencia enorme, maravillosa.
En este sendero no encontrarás a nadie más que a ti mismo.
Relájate y únicamente sé un espejo testigo, alerta,
reflejándolo todo.
No hagas nada con intención de que se refleje,
ni tengas intención de capturar el reflejo.
Sé solo un silencioso lago que refleja y toda la dicha será tuya.
Este momento presente se transforma en no-mente, no-tiempo;
sólo pureza, un espacio sin límites.
Esta es tu libertad.
Y salvo que seas un buda, no eres libre.
No sabes nada sobre la libertad.
Deja que esta experiencia se sumerja profundamente
en cada fibra de tu ser.
Empápate, mójate.
Cuando regreses, vuelve impregnado
con el vaho de tu naturaleza de buda.
Y recuerda este espacio, este camino,
porque tienes que cumplirlo en todas tus acciones
las veinticuatro horas.
Sentado, caminando, durmiendo,
tienes que seguir siendo un buda.
Entonces toda la existencia se transforma en éxtasis.
OSHO (53 sutras y cartas de meditación para el silencio y la paz interior)
Muchas gracias por tu blog.
ResponderEliminarTe envío un afectuoso abrazo,
Gonzalo
Gracias a ti también por tu espacio y tu entrega.
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